Translate

Buscar en este blog

7 de febrero de 2018

Salsa de pimienta verde Calvé



Normalmente suelo comer solomillo a la pimienta una vez cada 15 días o una vez al mes (solomillos baratos congelados del Mercadona, aunque muy tiernos). Y me gusta acompañar esos trozos de solomillo con la salsa de Knorr a la pimienta, es una salsa que me encanta, aunque sabe bastante a pimienta, le pega mucho a la carne, pero ¡¡Horror!! Voy al Alcampo, el único establecimiento en donde la encuentro, y está agotada. En todo el pasillo de salsas solo estaba el hueco de mi querida salsa Knorr, un sobre de salsa deshidratada de Gallina Blanca y esta salsa, asi que para no irme con las manos vacías me llevé esta. No me gustan las salsas deshidratadas, no me suelen quedar espesas.

A simple vista tiene un color blanco con partículas en su interior. Es un bote minúsculo de 225ml y ha costado 1,04€. Tiene una textura muy espesa, como si fuera mayonesa. Ahora hablemos del sabor.

El sabor de la salsa no es malo, mi problema principal son esas partículas, que me aventuro a decir que es la propia pimienta verde en grano entero. Entra bien en la boca hasta que te toca morder uno de esos granos y el picante te empieza a subir de forma repentina. Me gustaría más si el toque de pimienta no fuera en grano entero, sino en polvo; para mi gusto es un poco excesivo.

La salsa Knorr que tanto me gusta también pica ¡ojo!, pero al menos en esa no vas mordiendo granos de pimienta. Desde luego no creo que vuelva a comprarla a no ser que algún día cambien la receta. 

Todo es cuestión de gustos, si te gusta que hayan granos de pimienta, la salsa está muy bien, si eres como yo que no te gusta morder granos de pimienta y de repente te suba el picor, no la compres.





No hay comentarios:

Publicar un comentario